Estelar by Brandon Sanderson

Estelar by Brandon Sanderson

autor:Brandon Sanderson [Sanderson, Brandon]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Fantástico
editor: ePubLibre
publicado: 2018-12-31T16:00:00+00:00


22

Vapor nos aproximó con cautela al laberinto. Desde más cerca se distinguían las líneas de unión entre los distintos segmentos, fabricados por separado. Y no tenía todo aquel polvo rodeándolo, el que envolvía a un verdadero laberinto de zapador. Todo lo cual volvía aquella experiencia incluso más prosaica. No evocaba la misma sensación de pavor e inquietud que los vídeos.

—Mando de Vuelo nos advierte que tengamos cuidado con los interceptores —dijo Vapor por el canal de escuadrón—. ¿Los zapadores tienen cazas que atacan a quienes se acercan?

—No son cazas —respondió Brade con su voz severa—. El zapador controla unos trozos de roca llamados ascuas que tratan de interceptar y colisionar contra las naves que se aproximan.

—Muy bien —dijo Vapor—. He preguntado y el Mando de Vuelo me asegura que esto no será tan peligroso como nuestra prueba inicial. Al parecer, alguien del departamento ha hecho la brillante deducción de que, si matas a todos tus reclutas antes de tener tiempo de entrenarlos, tardas poco en quedarte sin reclutas.

Sonreí. Cuanto más hablaba Vapor, más conversacional se volvía su tono… y menos canguelo daba.

—Es un alivio —dije.

—Pero aun así, yo iría con cuidado —replicó ella—. La Supremacía no ha hecho muchos entrenamientos como este desde las guerras humanas. De momento, volvamos a la formación.

Me propulsé hacia delante cumpliendo la orden y me situé en mi puesto a la cabeza de nuestro equipo. Por desgracia, los demás no tenían ni por asomo tanta experiencia como yo en formaciones de batalla. Morriumur se quedaba demasiado atrás y Hesho intentó ponerse a mi altura hasta que Vapor le recordó que su nave debía permanecer cerca del centro. Y Brade…

Bueno, Brade se lanzó hacia delante, muy fuera de su posición. Tirda. Eran todos pilotos competentes, pero no formábamos un verdadero escuadrón. No teníamos experiencia volando juntos. Cobb había pasado semanas machacando las maniobras de vuelo en las cabezotas del Escuadrón Cielo. No nos había dejado combatir, o ni siquiera usar las armas, hasta que habíamos hecho tantos ejercicios de vuelo que sabíamos maniobrar en equipo por instinto.

Eso nos había salvado la vida docenas de veces cuando la pelea se había puesto dura. Allí, en el momento en que el enemigo vino hacia nosotros, en forma de drones equipados con recubrimientos pétreos para imitar a asteroides en pleno vuelo, el equipo se deshizo. Brade se lanzó al ataque sin mediar orden de Vapor. Morriumur empezó a disparar, pero… bueno, falló por mucho y tuve que apartarme más de la formación para asegurarme de que no me diese sin querer. Y para ser sincera, infracompensaba, porque aquella nave nueva no respondía tan bien como M-Bot y yo no estaba acostumbrada a su maniobrabilidad.

Vapor estaba tan ocupada hablando con nosotros que olvidó que su cometido como francotiradora era ponerse a derribar naves enemigas mientras estaban distraídas. El único de nosotros que no hizo un papel bochornoso fue Hesho, cuya nave realizó las maniobras que le ordenaban con precisión. El minúsculo zorro poeta quizá fuese un poco dramático, pero era evidente que su tripulación estaba bien entrenada.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.